El Bosque - Cadiz

EN EL MOMENTO JUSTO Y EL LUGAR ADECUADO PARA ...
Quedarse con el torero allí estaba ella en el hospital acechando al maestro mi entra el grave llamaba a su es mujer y a su hija
la familia no le dejaba ver a su es mujer ni a su hija por la ambición de ambiciones
Por favor maestro no se das cuenta que en esa situación fuisteis abducido por una persona con una trayectoria supuesta-mente que iba en busca del famosos
Te pillo el toro maestro te dio la cornada mas grande de la vida de ningún torero
Pide la nulidad del matrimonio creo que si alguien ahí en este mundo que se la merezca ese es usted no es posible que una persona estando en esa situación tan enfermo como esteva pueda decidir lo que le conviene o no referente al matrimonio ni a nada
por lo tanto maestro desde mi mas sentido respeto cuide a sus tres hijos y haga honor al buen nombre de torero que lleva y cuide de la madre de su hija antes de que sea tarde, ¡no ve torero que te necesita!
Ella si que te quiere a cambio de nada te lo ha demostrado y te lo demuestra cada día.
Maestro las mujeres tienen muchos recursos no se fíe de el paso que tiene que dar ni yo ros ni ataques de ansiedad ni nada de nada
Algunas mujeres prefieren aguantar lo que sea aunque ellas no sean felices ni hagan feliz a nadie, al contrario todos desgraciados
Cuando usted decida poner las cosas en su sitio ese día usted triunfara en las plazas y la gente le aclamara dentro y fuera de la plaza poque a cumplido con su oblación usted se piensa que todo el pueblo que quiere a belén se equivoca MAETRO PONGA SOLUCION aqui como el gran maestro que es esperamos verle dando esos pases que su pueblo espera,haciendo poesía escribiendo como usted sabe que escribió con renglones a golpe de albero,con sentimiento que hace el instante eterno con los vuelos de su un capote,y la magia de una cintura en danza,de una zapatilla clavada en la arena.
Dicen que los corazones están a la izquierda,y sí, yo doy fe a la izquierda están, yo los he visto palpitar en la plaza donde usted toreaba he visto por su torero en un silencio ensordecedor los latidos de nuestros corazones decían
olés, olés y olés
así termino la faena con nuestros aplausos,
dos orejas y el rabo Desde el respeto y la esperanza,
que el Dios de los toreros
que es el Dios en el que creo,
te guarde MAETRO TORERO