Santiago del Campo - Caceres

CARTA DE HOMENAJE Y DESPEDIDA A RIKI, MI MÁS FIEL Y LEAL AMIGO.

Que difíciles son siempre las despedidas, y sobre todo si sabes que esa es la última y definitiva, cuando lo haces de un fiel e incondicional amigo; de un amigo leal y desinteresado que todo te lo da y nada o muy poco te exige a cambio.
Viviste conmigo tu tierna y feliz infancia, a mi lado pasaste tu juventud y junto vivimos tu madurez y tu vejez, la recta final de la vida. Una vida de entrega y cariño, amor puro y mutuo agradecimiento permanente entre los dos.

Catorce años de convivencia diaria dan para mucho, y sin negar, porque no sería justo ocultarlo, que fueron más de uno los disgustos que en en alguna ocasión me acarreaste, fueron muchas más las satisfacciones, los momentos de alegría y el equilibrio que aportaste a mi vida, incondicional y extraordinario amigo.

Hace pocos días, tuve la desgracia de perderte víctima de una enfermedad irreversible, como consecuencia de tu desgaste y agotamiento físico propios de tu avanzada edad, y después de toda una dilatada vida sin ni siquiera un sólo antecedente en tu historial sanitario, no me tiembla la voz aunque se me quiebre, cuando te manifiesto que tuve que tomar la dura decisión de ayudarte a morir, cuando el pronóstico del profesional que te atendió me cayó encima aplastándome como una terrible losa. Pero jamás conociste el sufrimiento y disfrutaste de una vida alegre cómoda y placentera, y no era cuestión de que por prolongar unos días más tu vida, fueras víctima de una insufrible y prolongada agonía.

Tardaré mucho en olvidar esa triste y penetrante mirada de tus ojos negros llenos de tristeza y dolor, cuando me observabas calmada y detenidamente en tus últimos días, pareciendo suplicarme una solución para tu problema, cuando a mi alcance no estaba esa solución; una mirada muy distinta y distante de la mirada que siempre me brindabas, alegre y agradecida. Me será muy difícil olvidar ese jubiloso recibimiento que me brindaste durante tantos años por la noche, cada día cuando llegaba del trabajo presintiendo mi llegada mucho antes de llegar con el coche hasta garaje.

Será muy difícil olvidar las invitaciones que me hacías para jugar cuando llegaba a casa por las noches, cuando mi cuerpo, machacado por la dura jornada de trabajo, cada día me obligabas a llevar a cabo una sesión de juegos en el jardín antes de irnos a dormir; o el aviso matinal, subiendo a mi habitación presionándome con tu húmedo hociquito si veías que algún día era más tarde de lo normal y tardaba en levantarme; o la mirada de tristeza que reflejabas en tu rostro cuando nos marchábamos dejándote solo en casa aunque intuyeras que la ausencia fuera a ser breve;
También recordaré por mucho tiempo en las noches de festejos con tus odiados petardos, o en noches de tormentas cuando subías asustado y nervioso al dormitorio y te refugiabas acurrucado en el suelo, a mi lado, buscando protección escondiendo tu melenuda cabezota debajo de la cama, creyéndote quizás que así estabas a salvo del peligro de cohetes truenos y relámpagos. ¡Ingénuo de tí!.

Que difícil me va a resultar olvidarte, fiel y digno compañero, aunque algunos me digan que me lo facilitaría mucho más poniendo otro en tu lugar, por pensar que tú eres de muy difícil sustitución.
Te agradezco de todo corazón que hayas formado parte de mi vida, hayas llenado un hueco importante haciendo más llevaderos mis años de jubilado, y dejes en mi vida recuerdos indelebles que van a resultar muy difícil o imposible de borrar.
Volver de regreso a casa sin nadie que me esté espererando y me reciba como tú lo hacías, encontrar la casa sola, vacía, sin nadie que te espere en el jardín con la euforia y la alegría que tú nos esperabas, ya no será igual.
Sigo todavía, quizá por inercia....., buscándote cuando llego a casa para ver dónde te has escondiendo, sin querer aceptar la realidad de que ya te has ido y no vas a volver nunca jamás.

SIEMPRE TE TENDREMOS PRESENTE.

Bonita carta de despedida le as echo a tu querido perro,son muy cariñosos con los dueños.
Tengo un amigo que le paso algo parecido tambien lo tubo que sacrificar cada vez que se acordaba se les saltaban las lagrimas
Este hasta lo hizo incinerar y tiene las cenizas en casa
Debe de ser dificil tomar una decision como esa


SALUDOS