San Martín de Trevejo - Caceres

Un debate que parecía superado vuelve a plantearse. A raíz de una visita al Vaticano de un grupo de obispos brasileños, Benedicto XVI ha querido alertar sobre las divisiones que todavía provoca en la Iglesia hispanoamericana la Teología de la Liberación. El Papa recordó a los prelados el aniversario de la instrucción «Libertatis Nuntius», en la que «se subrayaba el peligro que implicaba la aceptación acrítica, por parte de algunos teólogos, de tesis y metodologías provenientes del marxismo». Al parecer, los males de la Teología de la Liberación siguen coleando: «Sus consecuencias más o menos visibles, hechas de rebelión, división, disenso, ofensa, anarquía, todavía se dejan sentir, creando en vuestras comunidades un gran sufrimiento y una grave pérdida de fuerzas vivas», lamentó el Papa en su discurso, que pidió que se vuelva a la lectura de la instrucción y al magisterio de la Iglesia.
Desde su llegada en el Chile revolucionario de Allende, con el socialismo en clave marxista como base ideológica, la Teología de la Liberación no consiguió ganarse a aquellos que más le interesaban: los pobres. Escribía en 1997 el entonces cardenal Ratzinger en «La Sal de la Tierra»: «Justo los más pobres huyeron de esa teología, porque no se sintieron atraídos por unas promesas intelectuales que nada les dan, mientras que, por el contrario sentían falta de calor y de consuelo propios de la religión. Por eso se refugian tanto en las sectas. Lógicamente, los simpatizantes de la Teología de la Liberación lo niegan. Pero hay gran parte de verdad en ello. Se interesaron más por una religión presente capaz de introducirse en sus vidas», analizaba en su documento.
Acertó de lleno el actual Pontífice, aunque hoy los fieles se inclinan más por la Iglesia protestante: en el año 2000 llegaron a 60 millones. Hoy son más de 70 millones en toda Hispanoamérica. El crecimiento protestante en los últimos cuarenta años ha sido del 400 por cien. Para el año 2020 los evangélicos llegarán al 50 por ciento de la población total en países como Guatemala, El Salvador y Honduras.


yo. saludos