Malpartida de Cáceres - Caceres

Vaya,vaya.Tiempo de primavera y agua a "manta", sobre caballos desbocados, sin jinetes, los cuales engullen una paella artesanal de pollo cebón y, un cubata de ron y pepsi. El domingo de las roscas de huevo y anís, gris, nadie camina sobre las viejas rutas trashumantes, nadie busca al guarda para llegar hasta los restos prehistóricos y las rocas horadadas, de gráficos astronómicos de los berrocales cigüeñeros.
Tiempo de potaje penitente y tortillas, días de luz y mantillas ennegrecidas, de costaleros malvas y guardianes en la larga noche sacra. Tiempo de renovación y relación social en las terrazas, en los caminos de arena y guijarros,tiempo furtivo cómo el de los amantes pasajeros en la calleja de las trescientas. Tiempo de fútbol final.

As clavao la semana¿santa?.

La Semana Santa es algo mas que las tortilla¿de patatas?, el potage, los repampanos y to lo que sigue. Sin las procesiones, sin la musica de la banda, sin la trata, sin el saque. La Semana Santa, se queda pequeña, si ogaño escampa y se ven buenas procesiones con mujeres enlutas y con las velas descalzas bajo el amarrao, el nazacero. El el Atrio, los mozos y otros se juegan las novias de pantalones ajustaos y tacones de agujas, con el pelo plancho, como las sepias y calamares.
Lo mejor el domingo cuando aparezco por alli con la escopeta y los cartuchos de papel, rompiendo el silencio, y asustando a las cigueñas.