Malpartida de Cáceres - Caceres

Las Tascas, Tabernas, son lugares de encuentros, lugares de socialización en los que se desarrolla una auténtica actividad social, al mismo tiempo que ejercen las mismas una estructuración en la sociedad donde están ubicados.

El inicio, la génesis que escribirían l@s alumn@s de J. de Vega, vestidos con la pana de los ochenta y el cambio social, se puede perder en la noche de los tiempos y en las distintas civilizaciones o culturas, según los antropólogos con la diplomatura de magisterio en trabajo social y primaria. El mayor desarrollo de estas instituciones sociales se decantan en el siglo XIX y el primer tercio del siglo XX, sobre todo en la primera época del franquismo, durante la España del piojo verde, la cartilla de racionamiento, el estraperlo, el contrabando de alimentos y medicinas, etc.

Actualmente perviven en zonas rurales, zonas urbanas de gran impacto turístico y preferentemente en los cascos históricos de las localidades. Una Tasca o Taberna, con su estado natural, no restaurado, es un IBI, un bien del patrimonio arqueológico y urbanístico. Por ello es lamentable que no se conservara el genuino salón del Casino de Arriba, ni del Salón de Bailes del Casino de Abajo, ni el baile de la Gloria, ni el suelo entarimado de Jerte, ni la Tasca del Pillo, ni la Bertó Caballero, ni la del Lure. Malpartida, siempre perdiendo señas de identidades, patrimonio artístico, arqueológico, sentimental, etc.

La calle Pintores de Malpartida era donde estaban ubicadas la mayoría de estas Tascas y Tabernas, a ellas acudían los jornaleros, yunteros, obreros, peones y oficiales ferroviarios en sus ratos de relax y ocio, y mayoritariamente solían irse con un puntazo de alcohol de garrafa, de odre de guarro, vino peleón de Montánchez, Alcuéscar. La mujeres sólo acudían a los Bailes de la Gloria , la Tía Mandarina, las Morcillas. Las mujeres de "la buena sociedad" acudían a los bailes de sociedad de los Casinos de los ricos"propietarios" y los artesanos: zapateros, carpinteros, guarnicioneros, esparteros, herreros, etc.´Éstos, eran además, los cazadores y pescadores locales.

Eran lugares lúgubres, sórdidos,espartanos, donde también se conseguía algún trabajo, algún jornal por recomendación del Tasquero o Tabernero. Lugares, donde se oían los chismes, rumores y cuentos del lugar, que eran creados por las fuerzas vivas del lugar. Actualmente, estas Tascas y Tabernas locales, han sido restauradas, alicatadas, cambiando los suelos de cal, de viejas lanchas de granito, por vulgares terrazos y catalanas. Las grandes barras o mostradores de fábrica o maderas por otras de menor altura y sin el mármol blanco, donde se cierran tratos comerciales, donde se establecen territorios y nichos de roles sociales, juegos amorosos y posteriores broncas, donde los gorrones y “gañoteros” le dan el palo al primo o la prima de turno. Donde algunos aceleran la muerte en mañanas de coñac, chupitos de Whisky, donde se refugian los exiliados del catre , el jergón, lejos de la legal y buscando otra cuestión alternativa, donde explayarse en sus doctas teorías sociales.....................

.. en la actualidad quedan pocos parroquianos, bebedores de vinos corrientes por todos las Tascas y Tabernas. Ahora se lleva el cañeo de cerveza de los snobs, los modernos de lo posmoderno, los del trinque, bien por la TVM, bien por periódico, por la revista, por Maila, por las sendas turísticas, por la Etnología local inventada(talla de los quintos en las puertas del Ayuntamiento, correr los gallos,et).

Aún así, algunos salen a beberse todos los chupitos de Whiskys posibles, a chatear vinos peleones con pincho de chorizo ibérico cocido, chistorras navarras, morcillas arroyanas, etc. El pueblo del trinque y el mamoneo, de emprendedores que no aprueban una oposición de conserje, pero quieren cobrar subvenciones de monitor del PPO, de fregonas y jinetas jerezanas, de buscadores de OVNIS y libros poscritos, copistas de las tradiciones y etnología de Marcos Arévalo.....

...las tascas, tabernas y bodegones locales perviven en la memoria del colectivo. Lorca, los menciona en Bernarda Alba. En aquellos antros, sin perversión pecaminosa en la Malpartida del XIX y del XX, eran locales donde el personal masculino pasaba el tiempo en que no estaban en casa o trabajando, bien jugando a las cartas, chateando vino peleones y corrosos, que a más de dos les dío un apretón y se fueron de barillas.

La limpieza era escasa, limpiaban los vasos en un barreño de cinz, el mismo con el mismo agua costrosa y cochambrosa. Aún asís siempre estaban concurrido, eran como una oficina del INEM o el SEXPE en la España de la cinco primeras década, en Malpartida perduraron hasta los años ochenta. Sus menús, sus raciones, sus tapas, eran lo de siempre, conejo/gato,morcillas,y nada más que guardaban en unas viejas cazuelas de porcelana puestas al calor de un infernillo de carburo o "léctrico", las cuales eran engullidas por gentes de bien y "posibles" en noches canallas de guitarras, coñac y anís. Puede que posteriormente alguno de la comitiva se vistiera de fantasma o de duende y fuese a visitar a una dama en cuestión por las callejas a las afueras del pueblo.

Los actuales parroquianos, los habituales de las rondas de vinos son pocos, ahora las rondas son de cerveza, no diarias, los findes, las fiestas, donde el alcohol es compartido con otras sustancias más adictivas entre personal jóven y maduro de los dos sexos y de los dos géneros. Cada Tasca, Taberna, Bar, genera un parroquian@ diferente según la hora y el día de la semana..

....las tascas y tabernas estaban reglamentadas, a ellas no podían acudir mujeres de las mancebias(prostibulos), ni podían alojar y pernoctar clientes más de tres días, sólo lo permitían a las posadas y mesones.

Entre las tascas y tabernas había diferencias, la primera no podía vender, ni ofrecer otra comida que carnes de caza y pescado, ni podían tener juegos. Su horario era solar, no podía estar abierta durante la noche para evitar peleas y alojar a vagos y maleantes.

En Malpartida había dos posadas en la Plaza, alguna casa de comidas en la Carretera y quizás alguna viuda que asilaba a forasteros en su casa y le ofrecía un plato caliente de cuchara.

La mayor función de las tabernas y tascas locales era dar un café en la madrugada y un vaso de aguardiente a los jornaleros, primero y después a los albañiles, jornaleros reconvertidos peones de albañil, que iban en bici a Cáceres a trabajar. La mayoría de los Tasqueros y Taberneros eran hombres de edad cercana a la jubilación o con problemas de salud. Además, en Malpartida, había dos bodegones, estos locales podían encuadrarse en un nivel inferior a las tasca y tabarnas, los bodegones tenian una barra pequeña en madera, alta, en la que se vendía vino a granel y ofrecia chatos, vasos de vino peleón o pistolas, botellas de cervezas rellenadas de vino peleón.

Todos sus clientes eran del sexo masculino, machos recios, atávicos, agrestes, alfas. De fácil escupitajo y blasfemía, aunque estaba prohibido por ley blasfemar y escupir en el suelo. Solían ir antes de comer, antes de cenar y en los descansos del Cine, mientras las mujeres iban a por churros. Eran auténticos parroquianos y los bodegones, tascas y tabernas cumplian una función social que hoy está repartida entre el centro de día, pisos tutelados, hogar de la tercera edad, Inem o Sexpe.....

.... la bebida por excelencia del parroquiano actual es el vino peleón, corriente(0,50cts)un vino ínfame o el pitarra de Salvatierra de Santiago, curado en los tejados de dicho pueblo. Antes hacían su ronda diaria de tascas y tabernas, ahora se apoltronan con el Marca o el As, mientras engullen media botella de pitarra o de peleón.

Son hombres jubilados, poco trabajadores, que no demuestran el menor interés en otras actividades de gentes de su edad encuadrados en los diferentes equipos de jugadores de petanca, ni tampoco se prestan para escenificar la obra de los aguadores y aguadoras para la TVM-Maria, ni para las cámaras digitales, ni ante un bocadillo de patatera y un ponche más o menos azucarado....

...el mercado laboral ha trastocado los hábitos y costrumbres de la España decimonónica en los tiempos presentes. La España de camilla y brasero de picón, de la camisa blanca, chaleco negro y pantalón de pana, se quedaron en los viejos baúles del sobrao, en el arca de la abuela. Se han reducido los tiempos de descanso en los trabajos de antes,ya nadie toma un café con carajillo a las 7 de la mañana, ni café con churro, a fuera parte de amas de casa, jubilados , prejubilados y algún baldarra de los que no pegan palo al agua.

Aquellos mozos y "jombres" aguerridos, agrestes, que se comían un barqueño de garbanzos y dos partes de chorizo arroyano con una botella de vino peleón, se quedaron en los andamios de madera ataos con soga gruesa en los años ochenta. Ahora se han domesticado, beben cervezas ligth, zumos, y cualquier cosa que no tenga alcohol. Ya no quedan albañiles de brazo largo, ni ferroviarios que dejaban media paga en Pata Palo o en [b]Molino de la estación[/b.

Los parroquianos de ahora hacen rondas de cervezas de barril con raciones de magro con champiñones y pimientos, con hamburguesas de queso y lechuga, con bacalao rebozao, son parroquianos que no buscan nada, ya tienen trabajo, no esperan al manijero de la finca, tan sólo marcan el territorio mostrando sus capacidades económicas y de relaciones sociales, lo hacen por turnos, menos los VIPs, éstos marcan la heredad a base de Rioja y raciones de jamón ibérico con queso de Almoharin, agoliendo a Gel de orfeta con colonia de Garrafa y la mirada perdida en las Ninfas, Vestales y Efebos que desafían la ley de la gravedad con la bendición del Padrino....

Borrado por su Autor.

.. los parroquianos de ahora, son sustituidos, por los maulas gorrones de los años ochenta, los vividores y gañoteros, sin estudios primarios que engañaban a los pardillos de pueblos lejanos. Jugadores de cartas y naipes, "paracaidistas" que querían vivir a costa de una mujer, mayor, fea y con nómina de funcionaria. Nunca doblaron el lomo, sólo para intentar cumplir con viejas Vestales, la cual, al no ser capaz de aguantar los 10 minutos de rigor, lo echarón.

En aquellos años ochenta, los que no tenían el certificado de estudios primarios, ni trabajo, ni lo buscaban, pasaban horas dando sablazos a los médicos, profesores, diseñadores, pintores, camareras, actores, enfermeros que vivían en la Cañada. Cuando éstos no eran suficientes conseguían llegar hasta Madrid, con otros, y saquear la nevera de otros paisan@s, l@s cuales, huían de sus casas.

Ahora, cuando el tiempo derrota, cuando pone a cada uno en su sitio, buscan cervezas entre yacimientos prerromanos, con la mirada perdida en las nóminas de funcionarias cincuentonas, viudas de buenas pensiones. En los años ochenta, los maulas no trabajaban, vivían a costa de sus padres, hasta que el Alcalde les dío un trabajo, para que no trabajaran mucho. Por ahí, están en las noches lánguidas y saudades, recordando aquellos tiempos, mientras hacen la pelota a otros maulas para seguir bebiendo cervezas de gorra gañotera

.. el desmadre, gañotero, más agudo ocurrió aquello iniciáticos Carnavales, aquellos carnavales, en los que el guarro que mataba el Charanga, valía más dinero que un toro Chaloret o un Vitorino, aquellos bandas de música que cobraban más que Miguel Rios. Algunos pasaban el resto del año comiendo de gorra, bebiendo de gañote y mirando a las novias de los amigos, por si estaban vulnerables. También con un grupo de maestras, dando la paliza verborreíca, hasta que se fueron de los pajares y de la pista del Jerte.

Las tascas se quedaron obsoletas, vacias, cuando irrumpieron las mujeres en las tascas y tabernas, a mediado de los setenta, las mujeres obligaron a una mayor limpieza e higiene en estos antros de perversión canalla, donde auténticos vividores tenían montado el despacho, el tajo, el curro, entre contar chismes al tasquero, engañar a los julais con las cartas y pedir prestado al suegro, a la mujer, a los cuñados, a cualquiera con tal de no doblar el lomo.

Atrás quedaron las reglas, el canón, el protocolo local no escrito, pero que se cumplía como una ley sagrada. En las Tascas sólo y nada más que hombres, curtíos, navajeros, quemados por el sol, por el "Amo", por el picón, por las jaras, por el horno de los ladrillo. A las mujeres no les permitían entrar en aquellas junglas salvajes, de machos atávicos, rijosos, donde el alcohol de garrafa, el vino de Aldea del Cano, los pinchos de conejos y gorriatos, marcaba el límite territorial, el poderío del "jombre". También existían bordoneros, autónomos y emprendedores de garrafa y autostop........

se te han olvidado los pinchos de lagarto,esos que los chavales de entonces cogian con el rejón y el espejo,pateando todo el dia de peña en peña,para venderlos a las tabernas para pincho,ó a la guardia civil,cosa impensable hoy en dia pero que entonces pagaban muy pero que muy bien

.. Claudio, eso lo desconozco, puede ser verdad, ó un leyenda urbana. Pero, la cronología del rejoneo,lagarteo, raneo,esparragueo, gorriatos. Pillar jilgueros con ligas(Pedro "Máscaló"), se queda muy atrás de los ochenta, es en esta época cuando comienzan las andaduras de los Maulas locales, los de la "subvención emprendedora", era en aquellas tascas,tabernas, bodegones,etc; dónde estos vividores, vivalavirgen, sentaron catédra.

Aquí, en los ochenta, es cuando comienzan a realizar los masters en los Barruecos, en la Rum-Rum, en los Carnavales, en los festivales que organizaban, en el Museo del Lavadero, y quién se quedaba con la pasta y como le querían dar el timo de la estampida a las mozas del lugar, aprovechándose de conocer a funcionarios, profesores, hijos de, etc. Estos Maulas se querían colocar al mismo nivel, hasta que le pedían el título, al final los echarón de todos los lugares, o hipotecarón a compañeros, amigos, agobiaron a profesionales en sus trabajos, etc.

En la Rum-Rum y sus fiestas, sus paellas y los grupos de actuaban gratís, lo recaudado no cuadraba en caja, la grabadora la tenía un imitador de J.MªGarcia, ex- concejal del PSOE y pensaban hacer oposición política a quién les daba local, pagaba la luz, las pilas y todo lo demás. Cuando se fueron todos, se quedó un esquirol emprendedor, aficionado a la cámara super8 y a la Canón analógica de 2ª mano, después le montaron unos ciclos y al final se quedó emprendiendo un viaje hacia MAILA con otros buscavidas y un biólogo de la Universidad del PATO-GANSO, mientras pasan la gorra por una revistilla....

... los parroquianos de los años setenta y "endespués", pasaban las fiestas con una botella de vino peleón y dos vasos de cristal. Su recorrido de inicio en la Calle Pintores, terminaba en cualquier calleja con otras botellas de vino. A las doce de la noche, los " amutilaos" los echaban de los antros, dentro se quedaban o entraban la autoridad competente, el sr. del Violín, el del Acordeón, y cuatro militantes de la Sección Femenina hasta que eran derrotados por el alcohol, por los pinchos de conejo(Cocina)morcillas, gorriatos,bacalao, etc.

La horda de "jombres" atávicos, agrestes, recios recorrían viejas "escallejas" empedradas o de arena, buscando el día, buscando su sentido, quizás con el deseo de aquellas mozas que le sonreían con los cántaros en la cabeza, salieran a las ventanas. Todo en silencio, un silencio sólido impuesto por el bronce y el hierro, un silencio que terminaba cuando lo permitían el Sr. Cura y el Alcalde, sólo entonces, con esos permisos podían ir a las casas de las mozas a darele una serenata.

La última que recuerdo ocurrió hace 17 años, en la Calle Fajardo, aquella noche llorarón varias solteronas, mientras otra sonreía con los sones de los "Clavelitos", fue una noche de cannes trémulas, de risas sin botellas de anís, de lágrimas negras de despedida, y el mocho de la fregona desgasta las catalanas de la terraza. Las Ninfas de la Nora se fueron a las vaquillas de Trujillo y al toro del Batán(pedanía del Guijo de Coria).......

los parroquianos, gentes de bares y tasca, hacen la rondilla de vinos por los antros, en la mediodía, en las caídas de la tardes. Van al bar, a la tasca, cómo quién va al SEXPE, a pasar la tarjeta del paro. Suelen ser puntuales, la misma hora, el mismo vino, la misma noticia, más los comentarios que le hace el tabernero, y esperan hasta que llegue la hora de irse, a "buscar un nuevo día". El casa, posiblemente, el mando de la TV, lo tenga la "parienta", controlando esos programas de indocuentados de la cinco, de los fantasmales ufólogos del 2º Milenio o cualquier memez de la Sexta o quizás la retrasmisión de un pleno del Ayunta, de los de Radio TV- Maria.

El motivo de ir diariamente a estos lugares público, es un rito, una costumbre ancestral, es buscar a alquien más y decirle que está aquí. Es salir de las cuatro paredes de la casa, de la monotonía diaria con sus allegados, romper la inercia de trienta, cuarenta años. Otros parroquianos, prefieren las copas, los combinados, los cubatas, los chupitos de Whisky, los tubos de cerveza. Después saltan de una a la otra acera de la Plaza, mirando donde estaban antes, quizás esperando encontrase con su otro yo y seguir con su rutina diaria. Mientras, por el ancho de la vieja plaza levitan ninfas de la Nora y del Pocillo, un agua de pozo de gastar y otra de beber......

.... la noche de los jueves la Plaza vieja está más oscura, lánguida, espesa. Falta la mesa de los intelectos, de los pescaores del bolo o el cupo, de las diez liebres, de las doscientas tortolas. Falta la luz que enciende y pervive en la oscuridad de la ignorancia, no hay biólogos naturalistas del geoparque de las Villuercas, ni los viejos porqueros, ni los viejos torneros de Getafe.

Nada, nada hay, transitan deambulando como zombis buscan el espejo a quién decir mañana es otro dia, sin gominolas no hay paraiso. No aparecen viejas viudas pasando listas, en stand by. La noche de los jueves, la Plaza parace un hogar del Pensionista, con su camilla, tapete verde y las cartas para jugar un tute perrero.

En esta noche de Jueves, no levitan las Ninfas y Vestales de la Nora y el Pocillo, ni siquiera las del Nuevo y la Soledad. Dónde se esconden las filosofías caseras, dónde están los efebos que ponen las cannes trémulas a las cuarentonas de chalere y piscina, dónde están los arqueólogos por entregas. Quizás busque a Maila en la vieja escombrera, o la cartera de quién tuvo que pagar los estudios de Bertoluzzi......

Me encanta leer todos tus cosas,pero no estoy de acuerdo de la memez de la sesta,es la unica cadena de tv(en mi opinion)que aun es potable,un saludo.

No suelo ver programas de TVs. Sólo busco una película, menos las de la A-3, no insufribles, ínfames, mil cortes publicitarios. Las noticias las sigo en los diarios, en papel e internet. Aunque reconozco que las noticias de la Sexta, cuando las dá Cristina Villanueva merecen verla, en igual nivel que cuando en la TV1, las daba Maria Casado en los fines de Semana.

Pero la cuestión en solfa está en los parroquianos, los habituales y los temporales de fines de semanas y otras fiestas que acuden a los escenarios públicos de Tascas, Bares, Cafeterías, etc.El porqué, qué se busca en el bar, en la Cafetería:

Las noches de los Viernes, se está poniendo de moda, salir en grupos, tomar raciones, cervezas, vinos y después copas, cubatas, chupitos(Villa-Massas), aunque esta es una costumbre muy extendida en las terrazas de Cáceres. Lo que se denota que la gente en Malpartida, ya ha perdido el pudor de comer en público, a veces con las manos(jamón y queso)¿ Que poco nivel?, cuando no y también las mocillas, los pinchos de pollo, las costillas de cerdo, etc.

Este es un objetivo del Parroquiano actual de fines de semana ¿dominguero?, comer con l@s amig@s en las terrazas de las Plazas( Mayor Y Nora), pero cuál es el mensaje que están mandando al resto de los parrquianos, que no comen, pero que si se toman un cafe, un chupito, una sin alcohol, un tubo de cerveza, mientras pasan lista, le "gorrea" un cigarro al camarero, y esperan para darle la cena a los pavos de Navidad.....

Pos i digo llo seño jombre cai guenas pecoras ca van pa lo bare pa ve ar camarero i ca luego le dan el numero der telefono en depue de paga toas biben da lapensio der mario i da lo que le coje a otro aluego etan lo sorterone ca na ma ban a ver er partio dafurgo i endepue se ban par cruze da laharreria i ota toor dia pega a lo mozo pa veve la cerveza sin paga na i otra ba pa jamarse toos lo magros con champiñones i la brocheta i lo pincho amoruno i er bacalao i too de gorra i la mozea ca ba pa etas toor dia repintando la voca en er espego der retrete i abenga luci er canaliyo lo tacone i la varriga con er tanga ai de too