Alcollarín - Caceres

“No tomarás el nombre de Dios en vano”, el segundo mandamiento. Y sin embargo, cuantas barbaridades se han cometido en nombre, no ya del Dios de los Diez mandamientos; sino de cualquier Dios. Desde el Sacrificio frustrado de Isaac, versus Antiguo Testamento; Ismael según el libro sagrado de los musulmanes… hasta hoy. Somos especialistas en ir al mismo tiempo contra el segundo y el quinto mandamientos.

En el nombre de Dios se ha condenado a quien iba contra la opinión de la iglesia; pobre Galileo; en el nombre del mismo Dios, se llame como se llame, se han ajustado cuentas, quitado enemigos de en medio, arrasado estirpes, razas e imperios, se organizaron cruzadas, se han cortado cabezas… En el nombre del mismo Dios, pero con distinta nomenclatura, se han enfrentado los hombres en mil guerras, alentados por el sectarismo y las ansias de poder de unos cuantos.

En el nombre de los dioses, se ponen candados, se construyen puertas para luego cerrarlas y pretender que solo las crucen los que cumplan con las normas, casi siempre caprichosas.

En el nombre de Dios, adopte el nombre que adopte, siguen habiendo hombres que matan a otros, simplemente por ser considerados infieles, o por ir contra la interpretación que hace algún iluminado de las pretendidas leyes divinas.

Como lo que son, los dignos representantes de esos dioses se dedicaban a quemar herejes y se dedican a lapidar seres humanos con más que dudosos argumentos… o se hace desaparecer al pueblo palestino.

Sin olvidar tampoco que en el nombre de Dios, cuyos representantes siguen prefiriendo repartir catecismos a preservativos; en el del Dios FMI y en el de las compañías farmacéuticas, África y otras zonas deprimidas están perdiendo prácticamente entera una generación a causa del SIDA…y lo que venga.

También en el nombre de dioses tan impresentables como el dólar o la bandera de barras y estrellas y sus acólitos se invaden países, se masacra a sus habitantes y luego se les sigue masacrando bajo la excusa de la legítima defensa; al tiempo que también se envía al matadero a los propios, aunque la mayoría sean negros o hispanos y algunos españoles e ingleses… Por cierto, no estaba previsto, pero Bush ha conseguido poner de acuerdo a suníes y chiies, enemigos irreconciliables donde los hubiera, todo un logro. Estos, los de Bush...de una tacada, se ventilan el segundo, el quinto y el décimo de los mandamientos.

Los angelitos de Atocha, se creían no solo perdonados porque mataban infieles en el nombre de su Dios, sino con un pasaje directo en el bolsillo hacia el paraíso por la hazaña. No tenían dudas, ni de llevarse por delante a mas de doscientos inocentes ni en seguir con la racha, si hubiesen podido.

Yo creo que el que mata de esta manera y no me refiero solo a las bombas, no es más que un psicópata pertenezca al credo que pertenezca, lo harían independientemente de las circunstancias, si encima se sienten justificados, mas fácil lo tienen. No creo que maten en nombre de ningún Dios, lo hacen en el nombre de los demonios y las frustraciones que llevan dentro, de un nihilismo enfermizo, mal entendido y siempre estimulado y espoleado por cualquier nombre de Dios mal empleado.

Es innegable que un gran número de atrocidades a lo largo de la historia se han cometido en nombre de alguna deidad, o han tenido un fuerte trasfondo religioso.Las más populares son las que ofrecen gran espectáculo visual, como Las Cruzadas, o los ataques a las Torres Gemelas en Nueva York. Pero igualmente horribles son las atrocidades más íntimas, de las que casi nadie se entera.

La película "En el Nombre de Dios" trata de una de estas situaciones que se han mantenido al margen del conocimiento público durante muchos años; en ella se narra la vida de un grupo de muchachas prisioneras de un "convento", donde se recluía a mujeres que habían supuestamente deshonrado a sus familias. Así conocemos a Rose (Dorothy Duffy) Bernardette (Nora-Jane Noone) y Margaret (Anne-Marie Duff), depositadas ahí por sus reales o imaginarias faltas a la moral (por ejemplo, parecería que el "pecado" de Bernardette es ser guapa). En este lugar las mujeres (de todas las edades, pues algunas llevan ahí décadas) son obligadas a trabajar incansablemente en la enorme lavandería, para "limpiar sus pecados y hacer penitencia", pero en realidad están contribuyendo en forma gratuita al lucrativo negocio de lavandería que administra la Hermana Bridget (Geraldine McEwan). Así pasan su vida las muchachas, viendo las tragedias que las rodean (como la de la pobre Crispina) y buscando un modo de escapar. Tal vez lo logren y tal vez no, pero el reto principal será mantener la cordura y el espíritu en este devastador lugar.

Esta excelente película se hubiera podido convertir en una tragedia barata, pero el director (ex-actor, por cierto) Peter Mullan ha logrado un espectacular logro, al mantener un tono sobrio en el que el drama se manifiesta naturalmente, sin forzar las emociones. Ciertamente se muestran situaciones trágicas y muy lamentables, pero Mullan controla perfectamente la película para evitar que salga de control y caiga en la categoría de lagrimoso melodrama.

Gran parte de este éxito recae en las actrices, que aunque son desconocidas y probablemente novatas, entregan actuaciones perfectas, tanto en técnica como en tono. Sus personalidades están muy bien definidas, y van mucho más allá de ser meras víctimas; pero tampoco son heroínas irrompibles. Sencillamente son mujeres en una horrible situación, empleando gran fortaleza de espíritu para mantener un saludable (para ellas, no para las monjas) nivel de rebeldía y descontento.

El que la cinta esté basada en hechos reales incrementa el impacto emocional y subraya las injusticias que comúnmente se cometen en nombre de la religión. Mullan no acusa a nadie, pero no hace falta que lo haga. El excesivo celo religioso y moral son los tácitos villanos, y esta valiente cinta deja que el público llegue a esa conclusión.

Definitivamente recomendable, "En el Nombre de Dios" junta una poderosa historia con una firme dirección y maravillosas actuaciones.

ESA ES LA GRANDEZA DE DIOS, QUE DEJA ALIBRES A LOS HOMBRES
EL QUE ESTÉ LIBRE DE CULPA QUE TIRE LA PRIMERA PIEDRA
LA HISTORIA ESTÁ LLENA DE ERRORES ACUMULADOS...PERO EL PROBLEMA NO ES DIOS, SOMOS LOS HOMBRES QUE USAMOS MAL EL PODER DADO

Rosa de los Vientos ,haces una crónica de la pelicula magnifica
Los primeros culpables fueron los padres de esas chicas que fueron sus jueces y verdugos

Despues la hipocresía de la sociedad de la época,que amparandose que hacian cáridad explotaban
Son muchos los errores que no debemos dejar que vuelvan a permitirse

Para mi ha sido un placer el leer vuestros escritos.
Estoy de acuerdo en lo que decis. Solo me ha llamado la atención lo que dice Avicena de los catecismos junto al reparto de condones en este mismo contexto, que huele un poco a demagogia o de querer cargar las tintas en el grupo especifico de la religión catolica. Esto desde luego sobra.
Yo paso de todo y creo más en las personas que en en los grupos politico o religioso. De estos ultimos no todos son malos y tenemos ejemplos de gentes ejemplares tanto en la antiguedad con hoy día. Por lo tanto es de ley recordarlos tambien.
Cada uno es responsable de sus actos.
Un abrazo a todos

Querido SISONERO.Como tu bien sabes,la iglesia catolica se opone de forma contundente al uso del preservativo tanto para frenar al SIDA y como metodo anticonceptivo.En el caso del SIDA,en muchas misiones de UGANDA Y CONGO amenazan con la excomunion a aquéllos creyentes,que utilicen los preservativos.Te puedo asegurar,que incluso en el caso de UGANDA, la iglesia catolica denomina a los preservativos como"artilugios del demonio".
Medicos sin fronteras,lleva ya muchos años tratando de conseguir que la iglesia catolica les apoye en su lucha contra el SIDA. Le pide por favor,que hagan campaña a favor del uso del preservativo tanto para frenar el sida como el aumento de natalidad desmesurada en muchos países africanos.Como respuesta siempre han recibido un no rotundo.Parece ser que prefieren ver como la población se contagia del virus del sida y del aumento de la pobreza galopante que sufre este continente.

UN SALUDO CORDIAL.

Amigo Avicena: Ignoro lo que me dices sobre lo que ocurre en Uganda y en el Congo entre la Iglesia Católica con respecto al SIDA. Yo paso un poco de todo esto. Pero voy a dar mi opinión al respecto
Cuando la Iglesia habla de lo que es bueno o es malo, lo hace desde su convicción de ser una sociedad que viene de Dios, y de interpretar lo que pueda ser la voluntad de Dios. Son nuestras creencias
Si algunos piden a la Iglesia que hable sobre la conveniencia del uso del CONDON, significa que suponen (o deberían suponer) esta autoridad de la Iglesia. Y suponer esta autoridad de la Iglesia es lo mismo que reconocer que Cristo es Dios. Son sus creencias y no vale la pena esforzarse ni hacer presión para que la Iglesia cambie su punto de vista y empiece a decir que el condón es lo mejor contra el SIDA.
Desde mi punto de visto como medico opino que la Iglesia no es responsable de la permanencia del Sida en el tercer mundo. La causa del SIDA y del gran aumento de la natalidad en esos países se debe al hambre y a la miseria extrema que sufren y padecen y DE ESO SOMOS TODOS RESPONSABLES

Amigo SISONERO.En algo estamos de acuerdo y es que la causa del sida y del exceso del indice de natalidad,es la miseria y el hambre.Pero como parte responsable que somos(el mundo occidental),es nuestra obligación moral ayudarles en todo lo referente a desterrar el subdesarrollo que sufre este continente.La iglesia catolica como estamento social de tran grande importancia en nuestra sociedad,debería "aparcar" sus intereses particulares y apoyar a todos aquéllos cooperantes en la titanica lucha contra el sida o la miseria que sufre AFRICA. En mi opnión,podían empezar por destinar un mayor aumento en su aportación economica a las misiones en este continente,en vez de tratar de pagar indemnizaciones millonarias por los abusos sexuales,tratando asi de limpiar su imagen e impidiendo a estos sacerdotes caer en manos de la justicia.

Es muy doloroso todo lo que cuentas
Creo que la IGLESIA oficialmente de cara ala mayoría no puede hacer un discurso contrario a la NORMA ,es decir a lo que siempre predica,no puede dar via libre a TODO, pero sé positivamente que
aunque no pueda dar un sí rotundo al preservativo, al divorcio ect... se da la vuelta muchas veces y consiente,o se hace como no enterada
CREO QUE LA LABOR principal-ya que la IGLESIA oficial no se atreve ,no quiere ...- es de los médicos sin fronteras que vayan mentalizando a la población
EN esas sociedades de las que hablas ,la Iglesia tendráel mismo poder que tuvo aqui antaño ,la lucha sera larga pero si todos empujamos las nuevas generaciones de seglares ,sanitarios,trabajadores sociales,haran una estupenda labor y ¡ojala! pronto veamos resultados

SALAMANCA,tienes muchisma razón, LA Iglesia COMO INSTITUCIÓN,no puede de un dia para otro cambiar, va dando pasitos que son demasiado lentos para la rapidez que exigimos la sociedad civil,pero igual que ya no vamos a misa con velito,se guardan horas de ayuno para comulgar o se besa la mano al parroco como hicieron ntras madres,llegará un dia DESEo pronto que admita el preservativo,para evitar el SIDA el exceso de natalidad,
En cualquier ámbito de la sociedad y la Iglesia no es menos ,llegaran a la cúpula GENTE NUEVA,personas jovenes que han sido educadas conociendo y viviendo en su casa ,en su instituto en su mundo laboral y de amistades los nuevos problemas que la sociedad moderna ha traido y esas generaciones tendran que dar la respuesta adecuada
ALGUIEN dará el paso hará la revolución que la IGLESIA NECESITA
¿NO os acordais de Lutero.Pablo VI,Teresa de Calcuta, ? todos ellos influyeron en los cambios

El condon con ser muy importante en la prevención del Sida, no lo es todo. Si hablamos de una posible culpa a la Iglesia por esto, debemos hablar igualmente de la drogadicción (jeringas etc), DEL SEXO ANAL y la miseria que son sus principales causas. Y de esto ultimo no tiene la culpa la Iglesia. Son costumbres modernas que se usan ahora en ambos sexos, junto con el sexo oral y que en tiempos de nuestros abuelos ni se pensaban.
La Iglesia más bien esta un poco desbordada por los nuevos acontecimientos.
Un abrazo a todos