Alcollarín - Caceres

Cuando las cosas andan mal hay partidos que atacan a la iglesia e incluso estudian la forma de suprimir la donación aceptada por muchos de dar un dinero (con la cruz que ponemos en una casilla) cuando hacemos nuestra declaración de la renta. Pero como se puede pensar esto ahora, como si fuera una panacea importante con lo que tenemos encima: parados, hambre, destrucción del trabajo y de la clase media, sed de justicia, corrupción política…
La Iglesia, siempre será atacada como gran entidad humana que es, y por lo tanto porque tiene poder.
El cristianismo aplica sus normas al igual que el Gobierno aplica las suyas.
Los gobiernos están para gobernar a todos por igual.
El intentar erradicar el hambre y el paro es función de los gobiernos. Pero el socorrer al hambriento lo está haciendo muy bien “Caritas”. No tengamos animadversión hacia los que cumplen una función de este tipo.
“Caritas Diocesanas” no son solo los curas, los frailes o las monjas, hoy día son más de fiar y a los que damos nuestros dineros y limosnas, porque son los que más están luchando contra el hambre. Su función es reconocida y por lo tanto no precisan adherirse a nadie sea del signo que sea.
No se comprende el ataque que hubo a los crucifijos. ¿Por qué se ataca sin motivo a nuestras creencias y al crucifijo nuestra principal insignia religiosa? Con esta medida no se arregla la crisis y es una cortina de humo para no ver, esconder y tratar nuestro principal problema que es el paro, la pobreza, la corrupción, el problema político, la crisis económica, la crisis energética…
Que cada uno cumpla con sus obligaciones al igual que debe y creo está haciendo “Caritas" diocesanas”.