Sabadell - Barcelona

¿Será éste el último Mundial de España con jugadores catalanes?
El Constitucional permite las selecciones catalanas en todos los deportes

21:15 (29-06-2010)

Casas amagó con el voto de calidad en el Poder Judicial. Los conservadores le advirtieron de que acudirían al Tribunal de la UE.

La sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de Cataluña no sólo avala de hecho la nación catalana, sino que, tal y como apuntan alarmadas a LA GACETA fuentes jurídicas implicadas en el fallo, “también reconoce las selecciones nacionales” de aquella comunidad. Objetivo cumplido. Aquel lema, hace no tanto exótico, de “una nación, una selección”, ya es una realidad gracias a la exigua mayoría de seis a cuatro impuesta al respecto en la deliberación final de la sentencia.

Al margen de las negociaciones bilaterales que la Generalitat establezca –legalmente legitimada–, con organismos como la FIFA, dos apartados de los artículos 134 y 142, así como el 200, avalan la selección nacional catalana (a la que, más que previsiblemente, antes o después le seguirán otras como la vasca). Así, en el segundo punto del artículo 134 (“Deporte y tiempo libre”), se establece que “la Generalitat participa en entidades y organismos de ámbito estatal, europeo e internacional que tengan por objeto el desarrollo del deporte”.

El 142.2 (dentro de un capítulo sobre juventud), regula que “corresponde a la Generalitat la suscripción de acuerdos con entidades internacionales y la participación en las mismas en colaboración con el Estado o de forma autónoma, si lo permite la normativa de la correspondiente entidad, y en todo caso la tramitación de documentos otorgados por entidades internacionales que afecten a personas, instalaciones o entidades con residencia en Cataluña, respetando la legislación del Estado”.

Más. Por si aún quedaba algún resquicio que enmendara a las selecciones nacionales de aquella comunidad, el artículo 200 (“Proyección internacional de las organizaciones de Cataluña”) se encarga de blindarlas: “La Generalitat debe promover la proyección internacional de las organizaciones sociales, culturales y deportivas de Cataluña y, si procede, su afiliación a las entidades afines de ámbito internacional, en el marco del cumplimiento de sus objetivos”.
“Un día muy triste”

Los cuatro magistrados conservadores que se opusieron a la aprobación de la constitucionalidad del cuarto bloque de artículos que finalmente salieron adelante (Vicente Conde, Javier Delgado, Ramón Rodríguez Arribas y Jorge Rodríguez Zapata) vivieron hoy “un día muy triste”, como indican fuentes de su entorno, quienes reconocen que María Emilia Casas “al final convenció a Jiménez (el vicepresidente del TC adscrito al bloque conservador con matices)”, y “que también lo intentó con todos los demás”.

Pese a las diferentes interpretaciones políticas de la sentencia, completamente mediadas por las próximas elecciones catalanas, se apunta que “la nación catalana, por muchas vueltas que se le dé y pese a la interpretación que le quita valor jurídico, ahí se queda en el texto para la posterioridad con todo lo que puede suponer”. De hecho, su máxima preocupación no es otra que el preámbulo de la norma catalana que durante cuatro años ha ido implantándose por la vía de los hechos. La nación permanece sentando un precedente de incalculables consecuencias y, tal y como relatan estas fuentes, “de hecho se ha creado un poder constituyente alternativo”.
Preocupación

La preocupación entre los conservadores ha sido máxima antes y después de la votación del séptimo y definitivo proyecto de ponencia sobre el Estatut. Desde el comienzo de las deliberaciones, varios de ellos temían el escenario que ha triunfado definitivamente. Resumían que “la postura de Aragón (progresista coincidente con los conservadores en varios aspectos) puede ser la de un submarino que, al final, ayude a que alguno de los conservadores se convenza, en un momento en el que Aragón pacte con el resto de progresistas, de que la oferta que éstos hagan suponga el mal menor posible”. Y así interpretan que ha sucedido con Jiménez, pieza clave de esta sentencia junto a Aragón, a la sazón, presidenciable del TC.

A la espera de la redacción definitiva de la sentencia, esgrimen que “se ha hecho con dignidad lo que se ha podido, todo ha sido muy tenso”. Apuntan que la postura mayoritaria entre los magistrados progresistas, pese a que Casas ya había indicado que la sentencia llegaría antes del verano, no era otra que la de demorar un pronunciamiento hasta septiembre. Mientras, tanto el tripartito como CiU seguirían con la deslegitimación del TC y aumentando la presión de la renovación en el Senado.
El apogeo del Pleno

Por otra parte, adelantan que “los votos particulares van a ser durísimos”. Los magistrados manifestarán “a las claras” su oposición al texto. Asimismo, inciden en “el tenso debate de las discusiones y el ambiente enrarecido que se vivió “ durante la votación y en las horas previas a la misma”.

La presidenta del Tribunal Constitucional “llegó a poner en juego algo tan elemental como la autoridad del Poder Judicial, sugiriendo que utilizaría su voto de calidad para avalar las atribuciones que se otorgaban a Cataluña”. Sin embargo, prosiguen las mismas fuentes, el plante de los conservadores en este aspecto fue rotundo, y llegaron a manifestar que estaban dispuestos a llegar hasta el mismo Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Ante la reacción de los conservadores, María Emilia Casas desistió en sus pretensiones.

“Las sentencias interpretativas no sirven para nada y ésta no es una excepción”, añaden con melancolía y enfado: “Ha quedado un texto tan confuso como repugnante”, confiesan. “Los partidos catalanes que han impulsado el Estatut, digan lo que digan, tienen que estar contentos, seguro”, argumentan dando a entender que las concesiones han sido prácticamente totales –eso sí, reconociendo la necesidad de los recursos–. “El que ha fracasado ha sido el propio TC”, reconocen apesadumbrados.

Por si fuera poco, auguran que “lo peor está por llegar con la redacción del fallo” que, a su juicio, dará lugar a recursos y graves litigios en el futuro. “Visto lo visto, parece que en Cataluña sólo se conformarían con un Estado libre asociado”, concluyen.

La polémica generada por el Estatut que impulsó el propio José Luis Rodríguez Zapatero no ha hecho nada más que empezar. Las elecciones catalanas abocan a la sobreactuación de todas las fuerzas políticas.

https://ww.intereconomia.com/noticias-gaceta/politica/constitucional-permite-las-selecciones-catalanas-todos-los-deportes

estos catalanes no se lo creen ni borrachos para tener seleccion tienen que tener una liga y para eso tienen que ser independientes jejejeje a tragar españa

Ojala sea el ultimo, Dios o Ala te oigan moro del sur.

JAJAJA, PARA JUGAR UN MUNDIA HAY QUE CLASIFICARSE, JAJAJJAJA

jajaja y quien va a querer jugar con una seleccion catalana estando la española