Cornellà de Llobregat - Barcelona

Los vecinos de Cornellá de Llobregat quieren declarar su ciudad 'no independiente'

Los organizadores de la iniciativa denuncian los obstáculos del Ayuntamiento (PSC) para la lectura de su manifiesto

viernes, 23 de noviembre de 2012, 11:26

Barcelona.- Los vecinos de Cornellá de Llobregat (Barcelona, 88.740 habitantes y 6,90 kilómetros cuadrados de extensión) quieren declarar su ciudad como "no independiente". Sin embargo, los organizadores de la iniciativa denuncian las trabas que el Ayuntamiento de la localidad (del PSC), -que desde 1985 a 2004 dirigió José Montilla-, les están poniendo, obstaculizan su objetivo. Al contrario que otras localidades como Vic, que ha podido declarar sin problemas su separación -hasta el momento simbólica-, de España, Cornellá no ha podido hacer lo propio declarando justamente lo contrario: que quieren seguir siendo parte de España como hasta ahora.

El objetivo de la iniciativa vecinal, -sin partidos políticos de por medio-, no es otro que leer el 'Manifiesto Cornellá de Llobregat: ciudad no independiente'. Sin embargo, hasta el momento, no han podido proceder a su lectura. María del Turruchel Alcantud, cabeza visible de la iniciativa, explica a La Voz Libre los problemas que desde el Ayuntamiento les están poniendo para evitar que puedan declarar su ciudad, (de la que son originarios el dúo Estopa, que ya se mostró contrario a la secesión catalana) como no independiente.

"Lo primero que pensamos fue en asociaciones de vecinos, luego en centros cívicos y en edificios públicos", cuenta a La Voz Libre María Turruchel. Tras encontrar una sola asociación vecinal que se mostró dispuesta a ceder su local para leer el manifiesto, la iniciativa vecinal se puso en marcha. Sin embargo, poco antes del acto, la asociación alegó un "error de agenda" y suspendió la lectura. Desde la organización no dudan en asegurar que las presiones del PSC causaron el paso atrás de la asociación de vecinos a última hora.

Ante la imposibilidad de poder utilizar los centros cívicos, que impiden en campaña electoral celebrar ningún tipo de acto, la iniciativa de Cornellá Ciudad no Independiente pidió al Ayuntamiento los permisos necesarios para leer su manifiesto en el Citilab, un espacio directamente controlado por el consistorio. Aunque al principio se mostraron participativos, -conociendo en todo momento el objeto de la lectura-, los responsables de dar la autorización comenzaron después a contestar con evasivas y terminaron por pedir 450 euros por el alquiler de una de las solas del edificio durante dos horas.

El Ayuntamiento emplazó entonces a la iniciativa vecinal a convertirse en asociación de vecinos, algo que exige una petición con 20 días de antelación y el correspondiente pago de tasas. "Con tantos obstáculos para reunirnos, yo me pregunto: ¿dónde está el derecho a la asociación? Solamente existe pasando por el registro", se queja María Turruchel, que asegura que la única solución que les ofreció la 2ª teniente de Alcalde fue la de "reunirnos en un bar". "Nos echan a las tascas y no podemos expresarnos", asegura Turruchel, que culpa directamente al PSC de las trabas con las que se han encontrado. "Tienen todo controlado desde hace 20 años. Se comportan como si Cornellá fuese su cortijo privado", denuncia.

Ante la imposiblidad de poder leer el 'Manifiesto Cornellá de Llobregat: ciudad no independiente' antes de las elecciones dle 25N, la iniciativa vecinal ha decidido esperar a la celebración de las mismas, asegurando, eso sí, que pese a los obstáculos, los vecinos reivindicarán su derecho a mantenerse dentro de España, sea cual sea el resultado de los comicios catalanes. "Nos hemos organizado por nuestra cuenta y queremos manifestar que no somos independientes", dice María que asegura que, viendo las trabas impuestas, "la democracia y el derecho de asociación están desgastados, pero por no utilizarse".

A continuación, se reproduce el 'Manifiesto Cornellá de Llobregat: ciudad no independiente':

"Conocer Cornellá es conocer su realidad que poco o nada tiene que ver con la que nos quieren imponer desde las distintas administraciones, desde la local a la autonómica. Dar la espalda a la realidad de Cornellá, que si por algo siempre se ha caracterizado es por ser crisol, es llevarla a la fractura social.

El bilingüísmo efectivo es la garantía de la realidad plural y no la línea de la imposición, de la uniformidad y de la subvención destinada a la construcción de una realidad que sólo existe en el imaginario de unos cuantos con delirios propios de quienes parecen interesados en pasar a la historia unidos a la lista de gobiernos totalitarios.

La población mayoritaria de Cornellá se expresa y usa el español como lengua habitual de comunicación en todas sus relaciones. Negar esta realidad es dar la espalda a la mayoría de cornellenses.

La defensa de la realidad de Cornellá pasa por el reconocimiento de que nuestra cultura no es la que la Administración se ha empeñado en dibujar a golpe de subvención o coacción.

El mejor instrumento para preservar, garantizar y potenciar la convivencia lingüística es asegurar el derecho de los ciudadanos a usar las lenguas oficiales sin traba alguna.

Se nos está intentando obligar a la sociedad de Cornellá, dentro de la locura nacionalista en la que se nos ha sumergido, a que elijamos y la nuestra no puede ser otra respuesta que un rotundo "NO" ... por que somos españoles y catalanes ... y no nos pueden obligar a elegir.

Los momentos de los miedos a ser señalados por opinar de manera distinta a la línea oficial que se nos pretende imponer se han acabado.

Desde una Cataluña, desde un Cornellá que unos pocos pretenden alejar de la realidad social, un grupo de personas nos levantamos enérgicamente, haciendo uso de una libertad que, a pasos agigantados es cercenada una y otra vez desde la imposición, para manifestar que:

- Sí a la unidad huyendo de la exclusión y de fronteras artificiales.

- Ssí a la realidad integradora

- Sí a la defensa de la realidad

- Sí al a libertad real."

https://ww.lavozlibre.com/noticias/ampliar/673983/los-vecinos-de-cornella-de-llobregat-quieren-declarar-su-ciudad-no-independiente