Ribera del Fresno - Badajoz

RIBERA DEL FRESNO
Una mujer entregó en la mesa electoral el sobre destinado al cepillo de la misa
Todo comenzó a la hora de ir a la misa de las 12 del mediodía, cuando el matrimonio preparaba las papeletas para ejercer a la salida de misa su derecho al voto
21.11.11 - 18:17 - ANTONIO ORTIZ |
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Ocurrió en Ribera del Fresno, durante la mañana de la jornada electoral del pasado domingo. Los protagonistas, un matrimonio de esta localidad. Todo comenzó a la hora de ir a la misa de las 12 del mediodía, cuando el matrimonio preparaba las papeletas para ejercer a la salida de misa su derecho al voto. Como de costumbre, prepararon las papeletas de ambos cónyuges tanto para el Congreso como el Senado. Entonces, la señora se acordó que tenía que preparar otro sobre con dinero para el cepillo de la Eucaristía. Salieron los dos de casa, felices, para ir a misa y después votar en la mesa de su colegio electoral, situado en las instalaciones del Ayuntamiento junto a la iglesia. Llevaban consigo preparados todos los sobres, los que introducirían en la urna para votar y también el que echarían en el cepillo de la iglesia.
Cuando comienza la recolecta del cepillo de la iglesia y llega a la altura de esta señora, introduce su mano en el bolso y saca un sobre blanco, suponiendo ella que se trataba del que contenía el dinero. Termina la misa y se dirigen los dos a la mesa donde les tocaba votar. Allí se saca el carnet para dárselo al presidente de la mesa, éste lee los apellidos y nombre y le pide los sobres. La mujer saca del bolso los dos sobres –uno de color blanco y otro de color sepia- para introducirlos en la urna, los coge el presidente y al tocarlo se da cuenta de que algo raro hay en el interior del sobre blanco y se lo dice: “¡Este sobre me parece que tiene algo raro!”. Ella le contesta que no, puesto que se trata del sobre blanco de votar. Ante la insistencia del presidente, intervino el marido para decirle: “¡Ábrelo, a ver qué hay dentro!”. Y,...¡oh, sorpresa! Al abrir el sobre, se encuentra con que dentro del sobre se encontraba el dinero que la señora pensaba echar en el cepillo de la Eucaristía, reaccionando de esta manera: “¡Pues entonces, en el cepillo he echado el sobre del voto!”. La anécdota no paró de circular por todo el pueblo desde el momento que se conoció, a eso de la una de la tarde.