La Coronada - Badajoz

Cuando el futuro depende de un ERE

El de carácter temporal es el menos traumático, pero crea angustia en sus protagonistas
10.04.11 - 00:06 -
PILAR ARMERO | PLASENCIA.

EREs temporales ha aprobado la Junta en los tres primeros meses del presente año, una media de 12 mensuales. La mayoría fueron por reducción de jornada -23- y los otros 15 por suspensiones de contrato.
EL ROSTRO DE LOS EXPEDIENTES DE EMPLEO

Un total de 38 empresas han recibido autorización de la Junta de Extremadura, en los tres primeros meses de este año, para poner en marcha expedientes de Regulación de Empleo (ERE) de carácter temporal.

Hay empresarios que han pedido suspender los contratos de sus trabajadores durante el tiempo que consideran necesario para remontar la crisis, mientras que otros han preferido la reducción de jornada, rebajando las horas de empleo del personal por no tener el volumen de trabajo que tenían antes.

Se trata de medidas, en cualquier caso, que se pactan previamente con los empleados, con el fin de intentar aplicarlas en las mejores condiciones posibles para ambas partes, patronos y asalariados. En la región se han puesto en marcha en empresas como la Mina de Aguablanca de Monesterio; la Deutsch Díter, de Zafra; la textil Fuentecapala de Navalmoral de La Mata o la cementera del Grupo Gallardo, en Alconera. La empresa paga una parte del salario y la Seguridad Social, otra.

Entre 2009 y 2010 se autorizaron en la comunidad autónoma expedientes que afectaron a 6.165 trabajadores, en un 44 por ciento de los casos con suspensión de empleo y en un 37 con reducción de jornada, según datos de UGT.

«Cuando hablamos de ERE, inmediatamente pensamos en la extinción de contratos, pero no tiene que ser así. Ahí está la regulación temporal o las reducciones de jornada para modular la producción de manera estacional», apunta Rosario Riñones, secretaria de Empleo de UGT.

Se trata de la fórmula menos traumática a la hora de capear el temporal económico, la que los sindicatos ven incluso como menos mala. No por ello, sin embargo, deja de crear intranquilidad e inseguridad entre quienes se ven obligados a pasar por ese aro en un intento por conservar de la manera que sea posible su puesto de trabajo.

Saludos.