La Coronada - Badajoz

Felicidades Peñalasala. Esta foto está entre las más valoradas de día.

Cuanto me alegro Peñalasala que tu foto esté entre las mas valoradas!!!
Te lo mereces.

Saludos.

Que gusto ver estas imagenes, gracias Peñalasala, se echan de menos estos lindos paisajes.

Un saludo.

Valkidia, cierto que este año el campo está "pa reventar", dan ganas de fotografiarlo todo. Yo, o nunca lo vi igual, o es que no lo reparé tanto. Hay una diversidad de colores y una espesura de todo tipo de plantas y flores, no solo en arroyos, que sería lo normal, sino en cualquier tipo de terreno que queda sin labrar, que llama la atención. Donde quiera te puedes encontrar con un mar de flores, pero que alcanzan casi un metro de altura.

Este año, hasta para el POETANOSTALGICO en sus mejores tiempos, seguro que le sería difícil dar alcance a algún perdigón.

Un saludo y buen fin de semana a todos.

Así es amigo mío ,para coger perdigones es imprescindible llevarlos a terrenos mas despejados, porque si no llevas un perro ,solo dependes de la vista para atraparlos y ya me dirás con la descripción que haces de los campos .. .De todas formas ya no se si los correría, no solo por la denuncia a la que te expones, sino porque ahora los puedo criar como si de gallinas se tratasen , perdiendo eso si, el acuse de recibo que como medalla daba la satisfacción tras el esfuerzo y auto reconocimiento por el deber cumplido.

Gracias por la foto

Un saludo

POETA, ¡cómo nos cambia la vida! Yo ahora no sería capaz de encerrar un perdigón en la jaula. Quiero decir un perdigón nacido y criado en libertad, claro. Otra cosa es que haya sido incubado en casa y que no conozca el campo, porque siendo así la cosa cambia. Lo que sí te digo es que todavía, cada vez que tropiezo en el campo con un bando, tengo que contenerme para no lanzarme en implacable persecución. Eso si, en vez de a veloz carrera, ahora sería más bien al “trote cochinero”

Un saludo y buenas noches a todos

Tenía varias parejas de perdices ,el año pasado y conseguí sacar alguna pollada con las gallinas pequeñas americanas ,pero tuve muy mala suerte y cuando llegó el tiempo de cambiar la pluma uno tras otro se fue muriendo ,quedándome bastante desilusionado por lo que me deshice de todos de forma drástica.

Luego investigando y preguntando a un amigo de Santa Amalia que cría bastantes, me explicó las medidas que hay que adoptar para no tener problemas y no es fácil porque incluso les ponía una especie de antibiótico en el agua.

¡ ya ves con lo fuertes y briosas que se crían en nuestros campos extremeños ,que dejaban temblando a nuestras ágiles y jóvenes piernas muchas veces sin conseguir ningún resultado!.¡Esos campos hacen milagros!.

Tengo que reconocer que aunque fui un empedernido corredor de perdigones, no obtuve tan buenos resultados como otros y no fue porque me faltara velocidad, quizás fuera porque quería cogerlas todas y esa forma avariciosa de desear algo hacia que se rompiera el saco y me quedara sin ninguna la mayoría de las veces.

Al igual que a ti ese instinto depredador aun se me dispara, cuando veo un bando de perdices ;pero consigo apaciguarle a duras penas con otros argumentos que antes nunca tenía, o al menos nunca se me ponían por delante en esos precisos y preciosos momentos, en que la indecisión era una perdida de tiempo que uno no podía permitirse ya que concedían ventaja al enemigo.

Saludos

¡¡¡Vamos a perdigones!!!

A propósito de correr perdigones, como bien dices, POETA, cuando “levantas” el bando, solo debes fijarte en uno solo y seguirle sin quitarle el ojo de encima, sobre todo cuando emprende la huída “a peón” después del vuelo. A propósito de esto, verás lo que me pasó a mi en cierta ocasión:

Iba corriendo tan fijamente detrás del perdigón, que al cruzar lo que yo creía que era solo una linde, ¡vaya costalazo que me pegué! ya que la misma linde, era también un notable desnivel, desnivel que yo en mi desaforada carrera no tuve tiempo de apreciar. Fue un seco tropezón que me hizo besar el suelo en menos de un "santiamén". Y nunca mejor dicho, porque fue visto y no visto. En mucho menos tiempo que lo cuento, “aterricé”, “despegué” y continué con la persecución. Lo mismo que caí, me levanté como un resorte y sin dejar de mirar al frente buscando de nuevo al perdigón, que como consecuencia de la caída, había perdido de vista.

Después de hacerme con el preciado trofeo, y ya con mucha más calma, fue cuando reparé en mi maltrecha rodilla, así como en la linde-trampa, que por no más de dos segundos cortó en seco mi carrera, y mientras contaba lo ocurrido al resto de la expedición, que ni siquiera se habían enterado.

Saludos, y buen finde a todos.

Bien está lo que bien acaba. Al menos te llevaste un premio de consolación .

Yo aprendí esa lección de no perderme ,siguiendo a varios, precisamente cuando me llegaba ya el ocaso en mis correrías .También había que tener en cuenta para tener un mayor o menor éxito varios factores como el tamaño de los pollos ya que podían ir desde una solo vuelo si eran pequeños o hasta dar 3 vuelos largos si ya era al final del verano y mas que perdigones parecían aviones a reacción.

Otro factor a tener en cuenta era el terreno, si coincidía que estaba arado cuando ya les llegaba el cansancio mejor ,que si era de rastrojo o se interponía de por medio un arroyo que con los juncos y el pastizal que siempre hay en ellos muy difícil encontrarlos.

De todas maneras divagando un poco ,si fuese fácil para cualquiera criarlas en casa como comprobé yo o de cogerlas corriendo en el campo, no tendría sentido aquella frase de “fueron felices y comieron perdices”.
Digo yo que alguien lo inventó relacionando la felicidad que ya de por si es rara de conseguir , con la dificultad que entraña comer perdices sea criándolas o cogiéndolas al galope.Quizás yo hubiese puesto caviar o la trufa en vez de perdices ;pero claro no tendría sentido si lo que se busca es la rima .

Saludos a tod@s