Alconchel - Badajoz

Tímidos aplausos al final, que fue lo mejor de la noche.

El segundo de la oposición, cansado de oir que falta y falta, le argumentó al jefe que eso de falta se puede mal interpretar y que la cosa podía terminar en el juzgado, a lo que el jefe pegó un tirón marcha atrás y pidió disculpas.

Continuando marcha atrás (perdón por la reiteración), el jefe prometió dinero para todos los cursos, los bailarines incluidos. Aquí hay dinero para todos.

No me quiero extender más, sólo pido una cosa un botijo, el agua potable del pueblo no está tan mala y seguro que es más barata.