Avilés - Asturias

En otro tiempo, solía echar la partida diaria. Será por eso que ahora, leyendo el ofrecimiento de un@ forer@ de leer las cartas,le doy vueltas del porqué se fue dejando esa partida y llego a pensar que, tal vez, las cartas estaban tan echadas que cada uno fuimos retirandonos cargando con el palo de la vida que nos iba tocando, con una suerte tan dispar y repartida que podría decirse que nadie nos sentimos ganadores mas alla que a lo que un juego corresponde. El caso es que acabamos mas pendientes del devenir de la suerte natural que de los triunfos o derrotas que nos ofreceían las cartas.
Sintiéndolo mucho por el talento imaginativo del echador@ de cartas, que seguro es mas vivaz que las señas de mi compañero de partida, en la suerte o desdicha que maneja y ofrece, yo creo que soy de los que están aquí con las cartas echadas desde antes de nacer y no hay mas vuelta de hoja que no sea el de la fantasía que me pudiera ofrecer ,de prestarme a ello, tal echador@ de las cartas. Así que prefiero seguir recordando los Oros, Copas, Espadas y Bastos de aquellas partidas que, si no me dieron muchos triunfos, al menos me diviertieron de una forma mas cercana que esotérica.