Santa Cruz de Marchena - Almeria

Otra Navidad, con la que está cayendo y nuestros gobernantes mutis al viento, parece mentira que tenga tanto secretismo para el pueblo, mientras que en los corrillos de la plaza, mientras el guardaespaldas vigila, los bisagras, dobletes y correveidiles andan con el chismorreo para ver a quien se pueden esquilar mañana.

La obra sin terminar, para refinar.
La Fuente sin agua, las mozas no lavan la enagua.
El ascensor sin funcionar, no se puede perdonar.
Los 150.000 euros sin aplicar, ahora a sumar y multiplicar.
La Junta de Andalucía, pidiendo papeles, la Navidades de los claveles.
ZP. Se hacen aquí los chanchullos, y se le culpa a él y los suyos.
Na niña de fulanico, que quiere a pedrico.
La edila que no porta por los plenos, porque le resulta ejenos.
Un tal vinagre, que no traga al Alcalde.
Un contable de regantes, que presume para que lo aguantes.
El inocente que quería ser edil, cuando sigue siendo infantil.
Luego viene el segundón, que busca para la alcaldía su ocasión.
Mientras la Alcaldesa reza, para que el viejo zorro no suelte la presa.
Y el concejal del loro, que quita la balsa del foro.
El extranjero, siempre está el primero.
La tormento, se alimenta con un pimiento.
El matrimonio, todo lo denuncia como demonio.
La cochera, muy al fondo y a orilla de la carretera.
Recogiendo aceituna, se ha lisiado más de una.
Ya no son las fiestas como antes, sólo duran unos instantes.
Traen a la banda, como el Rey al oso panda.
Y el Urdangarín de este lugar, con su poder a expoliado el lagar.
Mientras que los bribones, se aprovechan de los pobretones.
El tío del acebuche, que ya no puede con el buche.
Pero lo más desalmado, es un niño hombre desocupado.
Que le den el puesto de barrendero, que sacó el examen el primero.
Por último la estrella del Belén, para que a todos/das los/las beatos/tas les den.
Una Estrella
Una Flor
Una Doncella
Una Diosa del amor.

Y que viva, que viva la Pascua.

QUE OCASIÓN MÁS BUENA

La sequía tenemos buena
nos tenemos que apañar
como gente de Zurgena
y con vino acompañar

La matanza hay que aliñar
para guardarla en alacena
después se podrán apiñar
con cosa propia y ajena

Alguno podrá apezuñar
al tomar lo que almacena
y se pondrán a refunfuñar
si no alcanzan la centena

El mandamás se va a ensañar
al su estilo, con una chilena
tomando el lagar con su ruñar
y pillando alguna docena

Mientras los pobres con soñar
se pasan más de una treintena
de años, en ver, para recuñar
los virus de toda cuarentena

podremos gruñir o roñar
durante el día o una decena
con esto quieren reseñar
que llegarán a la quincena

Pero hasta les pueden regañar
quitándoles hasta la arena
y no se debería rascuñar
por la malicia que almacena

Pero todos van a arañar
que ocasión ¡más buena!
si nos pudiésemos bañar
para tener la balsa llena

Pepote