Tarazona de la Mancha - Albacete

Un 20% de los clientes de Leroy Merlin no necesitarán estar empadronados en Albacete

Este podría ser el otro titular del día, habida cuenta de la intención de esta empresa de que al menos un 80% de sus futuros140 trabajadores directos estén empadronados en la capital.

Aunque se me ocurren otros como:
“Los clientes de la provincia sólo aportarán un 20% a la facturación de Leroy Merlin”

o “Únicamente las pymes registradas en la capital verán reducida su actividad o su plantilla por la competencia directa de LM”

o “Leroy Merlin Albacete espera facturar como máximo un 20% de sus ventas a “no empadronados”

o por qué no : “Leroy Merlin piensa limitar su cifra de negocios de clientes no empadronados al 20%”

Estos titulares, por surrealistas y absurdos que pudieran parecer, subyacen dentro de la intención del Excmo. Ayuntamiento de Albacete, en connivencia con la propia empresa, de contratar casi exclusivamente a “empadronados” en un claro ejemplo de limitar o reducir la libre circulación de trabajadores o peor aún, el derecho constitucional a un puesto de trabajo independientemente de su sexo, raza, o por qué no, del pueblo en que a cada uno le salga de la real gana vivir o estar empadronado.

Como es de costumbre, no le duelen prendas en impedir el acceso a estos empleos a trabajadores de la provincia, cuyo único delito ha sido nacer, o vivir en zonas rurales, e intentar sacar sus pueblos adelante, día a día. “Señores parados, desempadrónense de sus pueblos donde no les necesitan y empadrónense en la city, regístrense aquí” Es el mensaje que parecen transmitir.

Si por ellos fuera, aceptarían con gusto la despoblación absoluta de la provincia –si cabe aún más- a cambio de contabilizar en su censo los anhelados 300.000 habitantes, que por cierto, se suelen utilizar sin la más mínima vergüenza en cualquier estudio de viabilidad de infraestructuras locales, previsiones a futuro que a todas luces están sobredimensionadas. Sirva de ejemplo el plan de ordenación territorial de Albacete capital en el que sí se incluyeron a 14 municipios en un radio de 30 km, como Madrigueras, Mahora o Tarazona por citar algunos. “Ahí es ná”.

A nadie le coge por sorpresa la actitud despectiva del Ayto. de Albacete respecto a los pueblos de la provincia ni sus delirios de grandeza que han hecho que vaya concediendo un número de licencias de centros comerciales propias de una ciudad de mucho más envergadura, o creando infraestructuras que a nadie se le escapa, estaban muy por encima de sus posibilidades reales. Luego claro, tenemos lo que tenemos, aeropuertos vacíos, estaciones ferroviarias – ¿quién lo pagará?- con reducción de servicio por falta de público, tiendas en centros comerciales que van cerrando de forma secuencial, en la misma medida en que se conceden licencias para otros nuevos…En fin, todo un despropósito y un alarde de mala gestión en la planificación de recursos e infraestructuras… o tal vez no, si consideramos los impactos urbanísticos asociados, aunque eso sería otra historia.

A estos políticos visionarios y empresarios interesados, que juegan a la economía de mercado cuando les interesa y cuando no, al autoabastecimiento, no les vendría mal una lección de humildad por parte de la gente de los pueblos. Por que hay que tener la cara muy dura para decirnos qué buenos clientes somos y luego cerrarnos la puerta del empleo. Amor con amor se paga señores.

Y es que en tiempos inciertos como los que nos ha tocado vivir, donde un puesto de trabajo es una bendición, toca pensar que no siempre es mejor compra la más barata. También hay que mirar a dónde va a parar ese dinero que nos hemos gastado. Toca ser egoístas y mirar por nuestro entorno cercano. El pequeño comercio, el comercio de proximidad, donde trabaja nuestra gente, el que nos parece tan caro comparado con la gran superficie y que tal vez no lo sea tanto si lo pensamos bien. Ese comercio o esa PYME que contrata a nuestros vecinos y familiares tal vez sea la salvación de la economía local, la de todos aquellos pueblos a los que no nos quieren –salvo como clientes- en las grandes instalaciones comerciales, porque no estamos empadronados en “la capital”.

En fin, que mucho os quiero a los pueblos, venid a la Feria y nutrid de clientes a los comercios de “la capital” pero que os quede claro que para engordar la saca e inflar cifras SÍ, pero contar con vosotros para trabajar, NO.



Emilio N.L.